Comienza el otoño y ya tenemos que ir preparando la fiesta de Halloween, por eso hoy os traemos cómo hacer paso a paso una calabaza personalizada para la noche del 31 de octubre.
Lo primero de todo es ir a una verdulería y conseguir una calabaza grande para que sea más fácil decorarla. ¡Aviso importante! En esta época del año el precio se dispara al igual que las uvas en Nochevieja por lo que es mejor comprarla con la mayor antelación posible. No cabe decir, que si tenéis un pequeño huerto propio o de algún amigo pedirle que os regale una para esta ocasión especial.
Bien, una vez que hemos conseguido la calabaza, la lavaremos y la secaremos con un trapo seco. A continuación, con un cuchillo de gran tamaño y afilado debemos cortar la parte superior.
Con un lapicero de punta gruesa dibujaremos el contorno de los ojos y la boca de la calabaza. Como veréis, pueden ser terroríficas, enfadas o alegres.
Una vez dibujado, con un sacabolas de helado o un cucharón empezamos a sacar todo el interior de la calabaza. No lo tiréis, con ello podéis hacer un pastel o una crema de calabaza.
Una vez vaciada, cogemos un cuchillo afilado o un cúter y empezamos a cortar sobre el contorno que hemos dibujado.
Hecho esto, lo tradicional es meter dentro de ella una vela encendida para que transmita miedo y volver a colocar la parte superior de la calabaza que cortamos al principio.
¡Feliz noche de Halloween!
Y no olvidéis elegir vuestro disfraz para Halloween.
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